A veces tenemos la suerte
de acariciar las plumas de un amor....
de un Gran Amor
La Ausencia ahora es la dueña
de todos los sueños de antes,
Los que escribimos ansiosos
En la tarde o en la noche.
Los que leímos amando
con la alegría del encuentro
Con el adiós de hasta luego
Con la ilusión de la espera.
A veces... El amor se escapa
Vuela y nos deja,
Sin decir un cuando...
sin decir jamás.
Solo vive por siempre
el pensamiento de espera,
todo lo dulce que queda
nunca jamás se termina.
Tenemos la suerte de haberlo
tenido, de haberlo gozado
aún estando dormidos
Mercedes Cueva Yanes
No hay comentarios:
Publicar un comentario