Los cambios empiezan a partir de uno mismo,
del cambio de nuestras actitudes, del hecho
de saber que donde estamos, no es nuestro
destino, es sólo un trayecto de nuestro camino.
Nuestro corazón está hecho con lo mejor
que existe en el cielo, en él se encuentra
fortaleza, misericordia y bondad. Todo
es pasajero, todo pasará. Los malos momentos
nos hacen refugiarnos en el alma, recordar
sin duda a aquellos que se durmieron en ella
siendo buenos, alentándonos a continuar.
Somos el despertar de un hermoso sueño,
traemos en nosotros lo necesario para hacer
que este mundo sea mejor, palpita en nosotros
ese anhelo. Los problemas no son eternos, viven
tan sólo un momento, cuando nuestra actitud
los enfrenta, empiezan a cambiar. El destino
de cada alma es encontrar dentro de sí mismo
la paz, descubrir la magia del amor,
sentirse amado y amar. Una palabra de aliento,
una sonrisa, una caricia con la mirada empieza
el cambio que puede movernos y mover en silencio,
nuestro alrededor.
Ale Barajas
nuestro alrededor.
Ale Barajas
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