Tras los vitrales de esos ojos
que alguna vez creí tan míos,
ya no hay ruta a nuestro mundo;
no hay unión ni primaveras;
no hay nosotros; no hay estíos...
En la textura de esos labios
que tantas veces besé con pasión,
ya no hay secretos de los dos;
no hay calor, ni la ambrosía
que me mataba la inanición...
En las líneas de esas manos
que siempre entrelazaba a las mías,
ya no está escrito mi destino;
no está mi nombre, ni mi piel;
no hay locura; no hay fantasías...
Entre los pliegues de esa piel,
que enésimas veces hice el amor,
ya no está mi rastro impregnado;
no está mi lengua ni mi avidez;
no está mi saliva; no está mi sudor...
En el palpitar de ese corazón
donde encontraba mi cálido nido,
ya no está el eco que me llamaba;
no hay suspiro; no hay fervor...
Todo vestigio de mí, se ha ido...
Alibut Sarabia
Imagen de la red.
https://www.facebook.com/Sarabia.Alibut
No hay comentarios:
Publicar un comentario