NADIE SE VA DEL TODO

nadie se va del todo
siempre y de algún modo
nos queda un poco de su amor
tras la ventana, por los rincones,
entre recortes y fotografías,
y en una silla, que hoy esta vacía

nadie se va del todo
siempre y de algún modo
nos queda un poco de sabor,
en la camisa, sobre la almohada,
entre las manos y en cualquier caricia,
y en lo profundo de los sentimientos

nadie se va del todo
siempre y de algún modo
algún trocito quedara, de su alegría,
de su nostalgia, de aquella luz que había en su mirar,
y la verdad que había en sus palabras

nadie se va del todo, nadie; 

nadie se va del todo, nadie, nadie, nadie

nadie se va del todo
siempre y de algún modo
nos volveremos a encontrar una mañana,
un mes de mayo, entre las notas de una melodía,
por esas hojas de los calendarios,
en las llamadas de los campanarios,
entre la gente en una romería,
nos volveremos a encontrar, un día

(Sergio Esquivel)