NO VENGAS...

Hoy no vengas, mi amor;
no tengo más ganas de sufrir...
Auséntate de mi travesía
y escóndete de mis ojos
cansados de tanto fluir...

No... no llegues, vida mía...
¡Sé un fantasma en mi ventana!
Llévate la silueta de tu recuerdo
y las agujas de no tenerte,
siquiera por esta mañana...

Aunque me duelan lo mismo
tu ausencia y tu presencia
¡Hoy no vengas, amor mío,
porque cada vez que te veo
me domina la demencia!

Me tiembla la voluntad...
Se me escurre el alma...
Mi pecho pierde su armonía
y mis labios y mi cuerpo
te exigen, nulos de calma...

Hoy te quiero muy lejos,
aunque vibres muy adentro...
Porque hoy duele más la realidad
de saber que entre tú y yo,
la distancia y el silencio;
el orgullo y el destino mismo
jamás nos darán la oportunidad
de algún efímero encuentro...

Alibut Sarabia