La noche está silente,
sin ruidos y sin vida,
o al menos eso intuye
mi mente confundida.
Los versos en mi alma
melodías del pasado,
la oscura madrugada
y un suspiro ya lejano.
Tu sombra sigue ahí,
detrás de las cortinas,
acariciando mi tristeza,
y abrazando mis delirios.
Son tantos los recuerdos,
que murieron en silencio,
los que habitan en mi ser,
y los que yacen en el cielo.
Otros viajan en el viento,
o se convierten en secretos,
en un retrato bien guardado,
en lo profundo del deseo.
Hay cosas que se olvidan,
más allá del subconsciente,
pero hay otras que te marcan
y siempre estarán presentes.
En esta noche te recuerdo,
y el silencio no me ayuda,
la luna llena me transporta,
a tantas noches añoradas.
Desearía tenerte cerca,
fabricar una noche eterna,
iluminar tu vida de estrellas
y sentir tus besos de nuevo.
Desearía tocarte otra vez,
sentir tu piel y tu aliento,
poder amarte toda la noche
y robarle segundos al tiempo.
Desearía tan solo verte,
contemplar tu bella sonrisa,
decirte que te amo de nuevo
y jamás despertar del sueño.
Mil Dias Y Mil Noches De Poesía.
Luis Enrique Young Velasco
@luisenriqueyoungvelasco
®Derechos Reservados
Foto/Internet
10/11/2018
No hay comentarios:
Publicar un comentario